Las ventas de vino se han disparado en este canal alimentación desde el inicio del estado de alarma. Sobre todo, en abril y mayo, con subidas más suaves en la desescalada, pero con un importante repunte en septiembre. De todas formas en ningún caso compensa la fuerte pérdida sufrida en hostelería.

Venta Vino

El vino con DOP fue el vino que más creció y se consolida como el más adquirido en valor con el 60% del gasto total. Estuvo a punto de superar al vino sin indicación en volumen (sí lo supera en el interanual). Los tintos son los vinos con DOP más adquiridos, pero crecieron por debajo de blancos y rosados.

Todas las categorías crecieron a muy buen ritmo, a excepción de los vinos de aguja. Por tipo de envase, la botella de 75 cl. fue el que más creció. Este envase ya supone el 59% del volumen y el 82% del gasto total en vino.

Según los datos del panel de alimentación publicados recientemente por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) y analizados por el Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv). Las compras de vino en el canal de alimentación español crecieron de forma notable durante los 9 primeros meses de 2020.

Tanto en términos de volumen (+22,4%) como de valor (+24,8%), hasta alcanzar los 303,6 millones de litros y los 856,5 millones de euros.

Respecto al mismo periodo de 2019, las compras han aumentado en 55,5 millones de litros y en 170 millones de euros. Con un precio medio que subió un 1,9% hasta los 2,82 €/litro (+5 céntimos).

Como muestra el gráfico que se muestra a continuación, este crecimiento se explica por el enorme aumento registrado en abril y mayo. decretación del estado de alarma en España a mediados de marzo, como consecuencia de la pandemia de coronavirus.

Así, 2020 empezó con una caída del volumen de vino adquirido en alimentación del 8,9% en el mes de enero (-2,6 millones de litros), con ligero aumento del 2,9% en febrero (+0,8 millones) y del 1,3% en marzo (+0,3 millones); y llegaron abril y mayo, cuando las compras se dispararon un 61,2% (+18 millones) y un 46,4% (+14 millones) respectivamente. Junio y julio registraron crecimientos que rondaron el 30%, más suave en agosto (+14,6%), conforme iba avanzando la desescalada. Sin embargo, observamos un repunte en septiembre (+21,4%), cuando comenzaron las restricciones en hostelería ante la llegada de la segunda ola.

Hay que recordar que alimentación es solo uno de los canales de consumo de vino en España y que los datos analizados en el presente informe no incluyen, por tanto, las cifras de HoReCa (hostelería), así como de un tercer canal que incluiría las compras de vino online, las compras directas a bodegas, autoconsumos, catering y establecimientos temporales, actividades relacionadas con el enoturismo, etcétera.

Ventas de vino por tipo en el canal alimentación

Observamos un crecimiento generalizado por categorías. Con la excepción del vino de aguja, cuyas compras se desplomaron en torno al 50%. Siendo el tipo de vino que menor relevancia tiene en la alimentación española.

Gráfico Volumen ventas canal Alimentación

El vino tranquilo con Denominación de Origen Protegida (DOP) fue el que más creció en estos 9 meses tanto en volumen como en valor, cerca del 35%, hasta alcanzar los 126,7 millones de litros y los 517,5 millones de euros.

Estas cifras suponen el 41,7% del volumen y el 60,4% del gasto total en alimentación. Estuvo a punto de superar al vino tranquilo sin indicación como el vino más demandado en volumen (sí lo supera ya en el periodo interanual), mientras que consolida su liderato en valor, con un precio medio de 4,08 €/litro, apenas 4 céntimos inferior al registrado en los 9
primeros meses de 2019.